segunda-feira, 20 de julho de 2009

A LA MEMORIA DE NICOLÁS GUILLÈN

1902-1989

Hablando con el de su poema

Digo que yo no soy un hombre puro

Yo te digo Nicolás Guillén
como lo dices también
lo puro es muy dificil de existir.
Yo también no soy un hombre puro.
Y todavia yo he bebido agua sucia
y como tú amo las mujeres
y puedo decir sus nombres.
Pero no me gusta comer
ni puerco con papas,
ni garbanzos, ni chorizos,
ni pollo, ni carnero, ni pavos
todavia me gusta el pescado
y marisco.
Yo no bebo cerveza ni aguardiente,
pero ron (una quemada! Que bárbara!)
y vino si, un vino rojo.
Y como tú, fornico.
Todavia, no has dicho
que entre un hombre y una mujer
que se aman,
en una alcoba,
cerrando las luces todo se hace.
Y sin embargo, no son impuros.
Yo soy impuro,
mas no completamente impuro,
mientras sigo diciendo,
igual que tú,
que muchas cosas impuras
hay en este mundo imperfecto.
Como tú, Nicolás,
Para que las cosas tengan su nombre,
non son más puras que mierda.
De lo que dijiste Nicolás,
tengo las mismas dudas
de la pureza de los clerigos
hasta todos los otros
que se dicen puros,
que son puros, puros, puros.
Yo digo que, puros, solo los cubanos.
Todavia yo no he tenido nunca
blenorragia.
Nunca he dado golpazos en mi pecho
me diciendo santo, porque no lo soy
y todavia no soy un diablo.
Como tú, Nicolás,
sin ser suficientemente impuro
yo se entender que es la pureza.
Pero, igual que Diógenes,
tengo una linterna en mis manos
para encontrar, en mi camino,
alguien que sea verdaderamente puro,
u que sea verdaderamente bueno.
Una cosa lo hago,
sigo tentando cambiar mis pensamientos,
para que pueda decir que yo
no soy asi tan malo.
Y como tú, Nicolás,
tengo algo de bien adentro de mí
y me quedo satisfecho.
Me voy!
Un abrazo fuerte Nicolás Guillén




Sem comentários: